La actividad consiste en trabajar la reflexión didáctica desde la poesía. Para ello he introducido un poema de Pablo Neruda al que modificaré los tiempos verbales (exceptuando las formas no personales) a un tiempo en pretérito perfecto de indicativo.
SILENCIO
Yo que crecí dentro de un árbol
tendría mucho que decir,
pero aprendí tanto silencio
que tengo mucho que callar
y eso se conoce creciendo
sin otro goce que crecer,
sin más pasión que la substancia,
sin más acción que la inocencia,
y por dentro el tiempo dorado
hasta que la altura lo llama
para convertirlo en naranja.
SILENCIO
Yo que he crecido dentro de un árbol
he tenido mucho que decir,
pero he aprendido tanto silencio
que he tenido mucho que callar
y eso se ha conocido creciendo
sin otro goce que crecer,
sin más pasión que la substancia,
sin más acción que la inocencia,
y por dentro el tiempo dorado
hasta que la altura lo ha llamado
para convertirlo en naranja.
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